A menudo escuchamos que, si la mayor parte de la electricidad se genera con fuentes renovables y nucleares, los precios deberían ser más bajos. Tiene sentido a primera vista: las renovables como la eólica y la solar tienen un coste de producción prácticamente nulo una vez instaladas, y la energía nuclear, aunque cara de construir, es muy barata de operar. Entonces, ¿por qué seguimos pagando tanto por la luz?
¿Por qué la electricidad sigue siendo cara si la mayoría proviene de fuentes baratas?
En 2024, en España, un 78% de la electricidad provino de fuentes renovables y nucleares. Sin embargo, los precios de la luz siguieron siendo elevados. La razón es que el coste de la electricidad no depende solo de cómo se genera, sino de otros factores clave:
1. Oferta y demanda
La electricidad no se almacena fácilmente en grandes cantidades, por lo que la oferta y la demanda deben estar siempre equilibradas. Si hay mucha demanda en un momento dado y no suficiente generación renovable, entran en juego tecnologías más caras (como los ciclos combinados de gas), que elevan el precio.
2. El mercado mayorista y la fijación de precios
El sistema de precios en el mercado eléctrico se basa en un modelo marginalista: el precio final lo marca la tecnología más cara que entra en juego en cada momento. Aunque haya mucha energía renovable barata, si hace falta usar gas para cubrir la demanda, su alto coste termina afectando a todos los precios.
3. El problema del almacenamiento
Las renovables son intermitentes: el sol no brilla de noche y el viento no siempre sopla. Si no hay suficiente capacidad de almacenamiento (como baterías o centrales hidroeléctricas de bombeo), se necesita recurrir a otras fuentes más caras cuando la producción renovable cae.
4. Regulación e impuestos
La electricidad no es solo el coste de generarla. En la factura final influyen peajes, cargos, impuestos y regulaciones. Estos costes adicionales pueden hacer que, aunque la generación sea barata, el consumidor final no lo note en su bolsillo.
¿Qué podemos hacer para bajar los precios?
Para lograr precios más bajos y estables, es clave seguir invirtiendo en almacenamiento de energía, en lo que aún estamos muy atrasados, así como mejorar la interconexión con otros países (por ejemplo, con Portugal, con quien compartimos territorio) para compartir excedentes y ajustar el sistema de fijación de precios para que refleje mejor el coste real de las renovables.
En definitiva, aunque contar con más renovables es un paso en la dirección correcta, no es suficiente por sí solo. La clave está en mejorar la infraestructura, optimizar el sistema de precios y facilitar que tanto empresas como particulares puedan beneficiarse de una electricidad más asequible y sostenible. Comprender cómo funciona el sistema nos ayuda a tomar mejores decisiones y a exigir cambios que realmente beneficien a todos.
Mientras tanto, los consumidores podemos tomar medidas para reducir el impacto en nuestra factura, eligiendo tarifas que se ajusten mejor a nuestros patrones de consumo, utilizar herramientas de gestión energética y aprovechar momentos de menor demanda para consumir energía más barata.
En Energía Tierra de Barros, estamos especializados en localizar las tarifas que mejor se adapten al consumo de cada cliente, facilitando su contratación de manera sencilla y transparente. Además, realizamos un seguimiento continuo para asegurarnos de que las condiciones no cambian durante la vigencia del mismo, y te avisamos si hay cambios en la tarifa que puedan afectar a tu factura. Con nosotros puedes optimizar tu consumo y reducir costes sin complicaciones.
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